Reseña por: Yadira Maldonado Guindín
La magia de su regreso se sintió en cada rincón desde el primer instante en que Pedro Capó pisó el escenario del Coliseo José Miguel Agrelot. Con una energía arrolladora, una presencia escénica que irradiaba luz y buena vibra se marcó uno de los mejores conciertos en el recinto. El cantautor puertorriqueño ofreció un espectáculo inolvidable el cual reafirmó su conexión con el público boricua.
La apertura del concierto estuvo a cargo de la artista argentina, Camilú, quien preparó el ambiente para recibir a nuestro querendón boricua.
La impecable producción Move Concerts PR, se lució en cada detalle de este concierto, desde la escenografía, el audio y los efectos especiales, creando un ambiente perfecto para la noche.
Capó deleitó a los presentes con un extenso repertorio de aproximadamente cuarenta canciones, permitiendo a su fanaticada recorrer todas las etapas de su carrera, desde sus inicios hasta su más reciente producción discográfica. La atmósfera en el Choliseo se convirtió en un mar de emociones, con la audiencia entregada por completo a cada interpretación, coreando de principio a fin cada uno de sus temas.
El artista expresó en todo momento sus muestras de agradecimiento y alegría de estar de regreso junto a su fanáticos puertorriqueños.
Uno de los momentos más especiales de la noche fue el estreno en vivo de varios temas de su nueva producción, entre ellos “Carretera”, “Adiós” y “Sabe bien” los cuales fueron recibidos con entusiasmo por el público, evidenciando que su música sigue evolucionando sin perder su esencia.
El espectáculo estuvo lleno de momentos memorables, pero uno de los más aclamados fue la llegada del legendario Danny Rivera. Juntos nos regalaron instantes mágicos al interpretar canciones del ayer como “Soñando con Puerto Rico” y “Sin fe”, provocando así, una de las ovaciones más grandes de la velada para ambos legendarios.
Sus cambios de vestuario fueron deslumbrantes, cada uno perfectamente alineado con su estilo elegante y moderno. En cada una de sus reapariciones en el escenario, la euforia del público se hacía sentir, reafirmando el magnetismo que ejerce sobre su audiencia.
Sin duda alguna, uno de los momentos cumbres del concierto lo vivimos con la interpretación de “Un Minuto”, donde el Coliseo entero se volcó en una ovación interminable. La emoción en el rostro de Capó era evidente, dejando ver que ese instante se convertiría en uno de los más especiales de su carrera.
Otra gran sorpresa lo fue la compañía de Farruko, quien se unió a Capó para interpretar un medley, que incluyó su éxito global “Calma Remix”, desatando la locura entre los presentes. La química entre ambos artistas y la energía del momento hicieron que este segmento fuera uno de los más vibrantes del show.
Nuestro virtuoso Pedro Capó reafirmó con este espectáculo que su carrera sigue en ascenso y que su amor por Puerto Rico es irreemplazable. La entrega que emana está llena de talento y pasión, características que lo han convertido en uno de los mejores cantautores puertorriqueños, asegurando así su lugar en la historia de la musical.
Gracias Pedro, por dejar tú huella con un concierto que quedará marcado en los corazones de quienes tuvieron el privilegio de vivirlo.
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