
Reseña por: Amarilis Cintrón López – Historiadora
(Caguas, Puerto Rico) El término bardo se utiliza para identificar a los poetas líricos o a los poetas heroicos. En el concierto Quiéreme mucho: Danny Rivera (El Bardo) la poesía musicalizada y la capacidad interpretativa del apodado como “La voz nacional de Puerto Rico” fueron protagonistas fue una exquisita noche dedicada a las madres.
Los que siguen la carrera de Danny Rivera pueden afirmar que en sus presentaciones hay una constante: su entrega al público y la capacidad de realizar un concierto que envuelve a los espectadores a disfrutar cada elemento incorporado en el libreto. Conforme pasan los años, Danny Rivera logra reinventarse para llevar un espectáculo distinto a los anteriores, tal como ocurrió el sábado, 10 de mayo de 2025 en el Centro de Bellas Artes de Caguas.
En este nuevo homenaje a las madres, Danny Rivera sorprendió al público al tener a Enrique “Kalani” Trinidad Silva en ese tema instrumental de apertura en el que iba tocando su flauta por el pasillo central de la planta baja, mientras Carlos Francisco “Pachito” Vega Soto le acompañaba entonando acordes en su guitarra desde el escenario. La entrada de Danny Rivera fue distinta; comenzó los primeros temas desplazándose desde el lateral derecho, recorriendo la primera fila de la zona del foso, haciendo paradas para saludar a los presentes, hasta llegar a la esquina opuesta para subir al escenario.


En el primer tema “Siempre me pasa lo mismo” le acompañó la banda y mientras iba cantando saludaba a la fanaticada ubicados en la primera fila. En el trayecto del foso, mientras saludaba a Josefa, ubicada a mitad de la zona del foso, le pusieron una estola diseñada con la bandera de Puerto Rico, que cubrió la acostumbrada estola que incorpora en sus atuendos. Luego de un breve saludo en el que destacó que ni la lluvia les detuvo para estar presentes en el concierto, Danny Rivera expresó “cuando nosotros comenzamos a cantar, lo hacíamos a capella.” Desde ese instante, los temas subsiguientes fueron un reflejo de esa expresión. Agasajó a los presentes con cinco temas que cantó a capella, mostrando la tesitura y la potencia del registro vocal que le distingue, sin decoración musical.

“La voz nacional de Puerto Rico” en versión masculina, destacó que fue su madre quien le enseñó a cantar desde que estaba en su vientre. Así expresó que recordaba canciones de su época de infancia y compartió “El bardo”, tema que los allí presentes le acompañaron a cantar. Continuó con “Solamente una vez”, “Perdón”, “Mis amores” y cerró la parte de cantar a capella con “Mi madre querida”. Tras un fuerte aplauso, se volvió a dirigir al público para dejarles saber que, cantando a capella, fue que comenzó en esa carrera musical con la que ha llegado a tantos corazones.
“La mamá”, tema que hizo famoso el francés Charles Aznavour, dedicado a la muerte de la madre fue la siguiente canción. Danny Rivera narró que conoció a Aznavour y mientras interpretaba el tema, se proyectaron imágenes en la pantalla de fondo de ese encuentro entre ambos.
Al hablar de la maternidad y de lo que transmiten las madres al producto que se gesta en su vientre, le pidió al público que le cantaran algunas nanas. Varias féminas compartieron esas nanas que le cantaban a sus hijos. Una de las damas tenía un timbre de voz tan potente que se escuchó en toda la sala de festivales y la nana que compartió decía así: “Duérmete niño, duerme y no llores, que si no duermes lloran las flores. Lloran las flores, llora la luna, duérmete niño de mi locura”.
A lo largo de todo el concierto, Danny Rivera tuvo una gran cantidad de sorpresas. Para la interpretación de “Te llegará una rosa”, invitó a dos féminas a pasar al escenario. Madre e hija se sentaron en las butacas dispuestas para ese detalle especial a esa madre escogida como representación de todas las madres que estaban en el concierto.



Una de las costumbres de Danny Rivera es integrar en sus espectáculos a nuevas voces y apoyar a los talentos que servirán al relevo generacional. Como primera invitada tuvo a Mónica Plácido, quién llegó elegantemente vestida con un traje negro largo y a dúo cantaron “Mar y cielo”. Llamó la atención ver al multinstrumentista Kalani Trinidad tocar su melódica, el teclado de aire que produce sonido cuando sopla la boquilla. Para el siguiente tema, Mónica se sentó en una de la butacas en medio del escenario y le acompañó a Danny Rivera en el coro del hermoso tema “Cuando vuelvas” que popularizó Agustín Lara. Al finalizar, la yaucana le expresó a Danny que la canción le recordaba a “Eres tú” de Mocedades, tema del que inició la interpretación apoderándose del escenario con la fuerza de su voz, mientras se veía una imagen de Mocedades Eurovision 1973- España de fondo. Un “bravo, Mónica” se escuchó entre el público que le regaló aplausos a su bonita ejecución armonizando con la voz de Danny Rivera.

“El amor es un cristal”, y “Desde abajo” continuaron en el repertorio. La felicidad que le provoca el apoyo del público a Danny Rivera se hizo evidente en su proyección y hasta en esos pasos de baile que realizó en medio del escenario mientras se escuchaba la banda y resaltaba la flauta de Kalani Trinidad. Haciendo alusión al mensaje de la letra, “a pesar de los años, de las horas, de las batallas perdidas, comenzaré de nuevo, inventaré otra vida”, Danny Rivera expresó “tenemos que reinventar la vida todos los días.” El Bardo que el pasado, 27 de febrero celebró sus 80 años, expresó que “la edad no nos puede detener de que lo intentemos todos los días… estas conclusiones yo las aprendí de las canciones, de la música y de lo que me enseñaron en mi casa”, mensaje muy necesario que provocó risas cuando indicó que no se puede perder la alegría de vivir, a pesar de Trump. “Te amaré” fue el siguiente tema con el que puso a gozar y a cantar a su fanaticada fiel.

El siguiente invitado fue el joven Michael Alexis Matos quién compartió su interpretación de “Quizás, Quizás” y “Cachito mío” en un homenaje a Nat King Cole, cuya imagen se proyectaba en la pantalla de fondo. El joven autista estudia canto, jazz y música caribeña en el Conservatorio de Música de Puerto Rico y se define como un apasionado de la música y el dibujo, cuyo mundo que es una mezcla de colores, sonidos y emociones. El público conoció el registro vocal de Michael Alexis y al finalizar sus temas, le regalaron los aplausos.

En el tema “Los marcianos”, Sugeily Torres “Suky” salió de su rol de coordinadora piso del concierto y le acompañó en el escenario con unos pasos de chachachá. Danny Rivera destacó que además de ser una excelente bailarina es maestra y se dedica a difundir la cultura. En ese momento, El Bardo, aprovechó para presentar al excelente equipo de músicos que le acompañaron. La banda estuvo compuesta por: Fernando Muscolo (piano), Emma L. Colón Zayas (güiro y percusión), Luis Alberto Cabrera Reyes (percusión/congas), Oscar Orlando “Lolo” Figueroa Hernández (batería), Luis Ernesto “Wiso” Vélez Vargas (bajo), Eduardo Alfonso Zayas Ventura (piano), Enrique “Kalani” Trinidad Silva (flauta, melódica, maracas y güiro), Juan Carlos Rodríguez Morales (guitarra eléctrica) y Carlos Francisco “Pachito” Vega Soto (director musical, cuatro y guitarra). Danny Rivera agradeció a todo el equipo que le asistió y reconoció a Lidda García de Grandes Eventos (relaciones públicas) y a Osvaldo Ruiz para Single Star Productions, productor del evento.

El concierto Quiéreme mucho de Danny Rivera contó con varios homenajes a intérpretes cuya música o relación de amistad y profesional influyeron en la vida de El Bardo. Danny seleccionó a El Trío los Ases para ese homenaje a los tríos que tantos hermosos temas le han regalado a muchas generaciones. Con Pachito en el requinto y una imagen de El Trío Los Ases de fondo, Danny Rivera le prestó la intensidad de su voz al tema “Ya sabrás” y a “Sabrá Dios”, temas que el trío mexicano convirtió en éxitos.
El reconocido tema “Para decir adiós” del compositor Roberto Figueroa, grabado por Danny Rivera a dúo con la cantante Eydie Gormé en el álbum “Muy amigos (1977), contó con una hermosa nueva versión entre Danny Rivera y Mónica Plácido. Le siguieron los icónicos temas “Tantos deseos de ella” y “Amada amante” que son parte del repertorio que Danny Rivera ha convertido en esos clásicos que su fanaticada siempre espera escuchar en sus conciertos.

El público le acompañó a cantar “Madrigal” a viva voz. Posteriormente, en homenaje a Lucecita Benítez seleccionó el tema “Sollozo” de Tito Henríquez, también conocido por ser el compositor de “Bello Amanecer”. Danny Rivera expresó que “Sollozo” fue una de las últimas canciones que grabó con Lucecita Benítez, mientras una imagen de las dos voces nacionales de Puerto Rico: Danny Rivera y Lucecita Benítez se proyectaba en la pantalla de fondo. La hermosa recreación de “Sollozo” junto a Mónica Plácido, les mereció una nueva ovación.

La selección musical del concierto Quiéreme mucho, incluyó uno de los temas que más veces y en más versiones se ha grabado en la historia de la música. “La Paloma”, tema que fue creado a mediados del siglo XIX (circa 1863), en el género habanero por el compositor y pianista vasco, Sebastián de Iradier Salaverri, tuvo una nueva versión con el dúo Danny-Mónica que merece llegar a un estudio de grabación con ambos. Hermosa interpretación, en esas privilegiadas voces que recibió fuertes aplausos.
Le tocó el turno al tema homónimo al título del concierto. Como palabras introductorias, Danny Rivera explicó la razón por la que escogió “Quiéreme mucho”; tema que le gustaba a muchos de sus familiares por lo que decidió titular así su nuevo espectáculo. “Desde el presente, recrear el pasado, es rejuvenecerse; no es nostalgia, única ni exclusivamente. Si recordamos es porque estamos viviendo lo que nunca ha muerto; y es hermoso” expresó Danny Rivera. Añadió que escogió esa canción “para nunca olvidarnos que nosotros somos la música, que tenemos la música por dentro… ¿a quién no le gusta que le digan quiéreme mucho, por favor? Los hijos deben querer mucho a sus madres y a sus padres, todos debemos desarrollar la capacidad que tenemos para amar. Es bueno hacer canciones para incentivar que sigamos amando… Eso es lo único que nos mantiene contentos y felices”. Luego del emotivo mensaje, Mónica Plácido inició el tema que cantaron a dúo, impartiéndole un lirismo que cautivó a todos los presentes.
Casi terminando el concierto, Danny Rivera volvió a interpretar otro tema a capella, en esta ocasión, vaciló con que también cantaba rancheras. Del compositor mexicano, José del Refugio “Cuco” Sánchez Saldaña, cantó “Grítenme, piedras del camino”. Un momento inesperado del concierto Quiéreme mucho ocurrió al Danny Rivera expresar que hay otras maneras de cantar las canciones para acercarlas a estos tiempos. Se dirigió a los de la vieja ola y los de la nueva ola y les invitó a irse a un nuevo ambiente, a la época del dance music, al ambiente de discoteca.


Una bola de espejos, distintiva de la música disco apareció colgando del techo, en el centro del escenario, mientras Danny Rivera interpretó la versión disco de los temas: “Cucurrucucú” y “Cielito lindo”. Para los que estamos acostumbrados a escuchar esos temas en versión ranchera, pero también disfrutamos la música disco, nos pareció un arreglo innovador que nos gozamos escucharlos en la voz del gran Danny Rivera. A los artistas invitados se les vio realizando los pasos de música disco en uno de los laterales del escenario. Al final, todos los invitados y los integrantes de la banda pasaron al frente del escenario para cantar juntos el coro de “Cielito Lindo” y despedirse del público que se disfrutó cada minuto de las dos horas y quince minutos del concierto.
Al ver su ejecución en el escenario, un aspecto para resaltar es que Danny Rivera encontró en la música su fórmula para revertir el paso del tiempo y usarlo a su favor. A sus recién cumplidos 80 años, a través de la potencia de su voz y de su capacidad interpretativa, le entrega su corazón y su alma al público que tanto le ama.
Felicitamos al equipo de trabajo compuesto por: Marisol Calvo (telepronter), Danny Ortiz (sonidista), Sugeily Torres (coordinadora de piso), Raquel Olivares (asistente), Edwin Delgado (asistente ), Aydil Meléndez (asistente) y Tamara Yantín, la propietaria de la librería El Candil en Ponce, (coordinadora de Danny Rivera), quienes junto a Single Star Productions fueron los encargados de la exitosa producción Quiéreme Mucho: Danny Rivera (El Bardo).