Por: Amarilis Cintrón López – Historiadora
Ana Torroja es una de las voces femeninas muy recordadas en Iberoamérica. La cantidad de éxitos que interpretó cuando formó parte de la agrupación musical Mecano siguen latentes en la memoria de un colectivo que disfruta a raudales su música. Tras una exitosa carrera como solista, se mantiene estremeciendo a la fanaticada que disfruta ese recorrido en el tiempo que ofrece en sus conciertos. El escenario del Coca Cola Music Hall le volvió a recibir el pasado, 5 de noviembre de 2023 donde el público disfrutó de su proyección escénica y de esos temas que forman parte del colectivo.
Vestida con un conjunto de blusa manga larga y pantalón corto en color verde lima, con su distintivo cabello rubio, Ana Torroja inició un viaje musical, con esos temas que trascienden el tiempo. Muchas de las canciones que interpretó son un referente a lo adelantados que estaban en el tiempo, cuando grabaron las canciones en la década de 1980 y 1990. Los que crecieron con hermanos adolescentes en esa época, tenían los radios con los cassettes de Mecano, que ponían una y otra vez, por lo que su música se convirtió en un referente mientras fueron creciendo.
Un vídeo simulando diversas pantallas de televisor, con el conteo regresivo programado a 10 minutos, en el que se proyectaban fragmentos de canciones fue el preámbulo para ambientar el Coca Cola Music Hall con los recuerdos de las décadas de los 80 y 90 que resalta a Mecano. El concierto fue dividido en cinco secciones de un conjunto de canciones. La primera sección tuvo cuatro temas: Cine, Ay que pesado, Me colé y Hoy no me puedo levantar.
Al terminar el primer bloque de temas, un “Muy buenas noches, Puerto Rico, ¿Cómo estáis? Primero que nada, daros las gracias a todos por haberos acercado en una tarde de domingo… “Vamos a pasar una tarde de domingo diferente”, a lo que rápidamente añadió que “vamos a hacer un viaje por la música que siempre es una buena terapia, siempre es muy catártico. Que ese viaje va a ser personal, cada uno que lo haga como quiera, como lo sintiera. De lo que se trata es de sentirse libres y de salir de aquí mucho más felices. Muchas gracias, Puerto Rico, te quiero».
En el segundo bloque se lo dedicó a otros hermosos temas que interpretó y otros que también comparte créditos en la creación en su faceta como solista, cuando se separaron los integrantes de Mecano. A contratiempo formó parte de Puntos Cardinales, su primera grabación de estudio como solista y se ha convertido en un clásico de ese reinicio de su carrera musical. El segundo tema Ya no te quiero formó parte de la grabación Pasajes de un sueño de 1999 e integró sus movimientos sensuales coreografiados con sus integrantes en las cuerdas. De su producción Girados con Miguel Bosé seleccionó Corazones, que cantó acompañada de imágenes de corazones flotando en la pantalla de fondo. Culminó esa sección con el tema Veinte mariposas que formó parte de su álbum de estudio Frágil del 2003. Mientras los brazos de Ana Torroja creaban ondas, simulando el vuelo de las alas las mariposas, se dirigió al público para decirles que “los sueños como alas de mariposas, que nos ayudan a volar. Puerto Rico, que nunca os quiten los sueños, que nunca os corten las alas. Puerto Rico a volar”. La mariposa aleteando sus alas, que al final se metamorfoseaba entre colores, quedó fragmentada en muchas mariposas de colores sobrevolando el escenario.
Luego del tema Veinte mariposas con el que cerró la segunda sección de su concierto, Ana Torroja salió del escenario para su cambio de ropa, en el que resaltó por su elegante mameluco en azul royal. El escenario se iluminó para presentar a una elegante Ana Torroja, sentada sobre un taburete que le preguntó a su fanaticada ¿Cómo va ese ese viaje, bien? No saben las ganas que teníamos de estar en Puerto Rico, hacía un año y cacho como dicen en México, pero se hace muy largo.» Sus expresiones fueron aplaudidas cuando resaltó que estuvo recorriendo la zona antigua del Viejo San Juan y pronunció un «qué bonito es Puerto Rico». Sus canciones son un viaje al pasado que se mantienen muy vivas en el presente. Para el tema Cruz de Navajas ofreció una nueva versión mucho más suave, de la que se acompañó de la imagen de una paloma.
El icónico tema de Mecano titulado 7 de septiembre fue ampliamente cantado por la audiencia totalmente de pie, mientras se disfrutaban las mándalas proyectadas en la pantalla del escenario. Llama le siguió con la coreografía en sincronía con los integrantes de las cuerdas que le acompañaron en el frente del escenario. Sonrisa del álbum homónimo de 2010 continuó, es un hermoso tema que refleja la sonrisa por amor propio que se pronuncia en el rostro de una persona que desata las vendas que ocultaban su mirada, como dice la canción. La sección cerró con el clásico Los Amantes de Mecano (1988) que mantuvo el ánimo de la gente bailando y cantando.
En un aparte, dijo que en el momento que se escribió la siguiente canción que ya tiene muchos años, “había que ser muy valiente para cantarle a la diversidad del amor”. Ana Torroja resaltó que “es verdad que se ha ido andando el camino, pero todavía queda muchísimo camino”, a lo que integró que espera que esa “canción sea eterna y que con el tiempo no haya que cantarla nunca más”, aludiendo a la necesidad del respeto al prójimo que merecen los que se aman entre iguales. Si bien es cierto que se han adelantado tramos en el trayecto hacia el respeto a la diversidad, Mujer contra mujer (1988), es uno de esos temas de tinta profunda que visibiliza la lucha por el amor entre iguales, que desde la década de los 80, sigue proyectando a la banda Mecano como adelantada a los tiempos por las temáticas que utilizaron para darle voz y hacerse entre los favoritos de la gente que sentían en su propia piel lo que relataban sus temas. Aire del álbum Ya viene el sol (1984) y el tema Hora y cuarto (2021) que grabó junto a su querida amiga Alaska le siguieron en el turno en esa velada repleta de recuerdos.
La energía de Ana Torroja a sus casi 64 años, que cumplirá el próximo 28 de diciembre y la calidad de su voz con el paso de los años son más que evidentes. Los temas La fuerza del destino (1988) y Un año más (1988) que conformaron parte de los éxitos que vocalizó en Descanso dominical, el quinto álbum de estudio de Mecano, que el público ha hecho parte de la lista de canciones favoritas desde que fueron grabados fueron seleccionadas para la falsa salida.
El público comenzó a gritar el “otra, otra” y cuando se encendieron las luces del Coca Cola Music Hall, le correspondió el turno al emotivo tema que evoca la maternidad Hijo de la luna, mientras se observaba en la pantalla un cielo cuajado de estrellas. De sus éxitos como solista continuó Duele el amor que le acompañó su guitarrista Iván Rodríguez para hacer la voz masculina del tema que otrora grabó con el mexicano Alex Syntek.
Ana Torroja agradeció a su fanaticada puertorriqueña por una noche especial, antes de anunciar que el viaje estaba llegando a su final. Barco a Venus fue el último tema que interpretó con su banda, antes de complacer al público con las peticiones de fragmentos de algunos temas que no estaban integrados en el repertorio de su gira Volver 2023. Definitivamente, hay artistas que se integran en la memoria de la gente y sus temas forman parte de esos recuerdos musicales que se mantienen vivo entre sus fanáticos. Ana Torroja es de esas voces que el mundo conoció en la década de 1980 que sigue provocando gratas emociones en los escenarios. G Enlighten Productions fue la casa productora encargada de una velada que los fanáticos de Ana Torroja disfrutaron en las casi dos horas de espectáculo.
Ana Torroja despidió a la banda del escenario, pero se quedó cantando el popurrí de temas que le fueron solicitando. En el momento que se dirigió al público y les dijo “seguramente haya canciones que no haya cantado esta noche. ¿Alguna importante para alguien que no se pueda ir a casa si no se las canto?, acto seguido se empezaron a escuchar títulos de canciones que el público deseaba escuchar. Los próximos 10 minutos finales fueron emocionantes por la cantidad de peticiones que sus seguidores deseaban escuchar y, a capela, les complació. La banda regresó para cantar el inolvidable tema “Me cuesta tanto olvidarte”, dando así por terminada la velada. Ya Puerto Rico se queda en la espera de su próximo encuentro con la española Ana Torroja, quién desde hace poco más de cuatro décadas, se aseguró de ocupar un lugar especial en el corazón de los puertorriqueños.
Fotos de Félix Guayciba