Por: Amarilis Cintrón López- Historiadora
La espera para la cita con Willie Colón y su concierto titulado Asalto Navideño, 52 aniversario llegó a feliz término el sábado, 14 de enero de 2023 en el Coca Cola Music Hall en el Distrito de Convenciones de Puerto Rico. Su aparición en el venue puertorriqueño del momento, inició con un “Buenas noches y gracias por su apoyo y su presencia esta noche” que destacó como parte de sus primeras palabras con las que expresó un genuino agradecimiento a su fanaticada por el apoyo a más de cinco décadas de carrera musical.
La primera canción y la única alusiva a la temática navideña e incluida en el álbum Asalto Navideño de 1970 fue Aires De Navidad, en la que se acompañó del reconocido cuatrista puertorriqueño Eligio Claudio Díaz, conocido en el ambiente artístico como Prodigio Claudio. Acto seguido, ejecutando su trombón de pistones deleitó a la audiencia con un fragmento de la reconocida pieza, Lamento Borincano de Rafael Hernández, antes de proseguir su espectáculo con un “medley” entre los temas Soñando con Puerto Rico e Idilio. Para ambos temas, la pantalla en el escenario mostró una compilación de imágenes de los inicios de más de cincuenta años de prolífica trayectoria musical con el cual llevaron a la audiencia a un viaje visual mientras disfrutaba de las armonías de la orquesta que tuvo a Ennio Gatti como su director musical.
William Anthony Colón Román, mejor conocido por Willie Colón, quién nació un 28 de abril de 1950 en el barrio puertorriqueño en el sur del Bronx en Nueva York y está próximo a cumplir sus 73 años, destacó que fue en 1966 cuándo grabó su primer disco con el ponceño Héctor Lavoe. En unas emotivas palabras, agradeció abiertamente a Héctor Lavoe, reconocido como El cantante, el que juntos crearon un estilo que los distinguió y con el cuál ha logrado mantenerse vigente en la esfera musical contemporánea.
Un colorido y dinámico diseño de luces se destacó en la interpretación del siguiente “medley” que incluyó los temas Ché Ché Colé, Barrunto, Te Conozco (bacalao) y Calle Luna, calle Sol, fueron parte de esos éxitos que la audiencia disfrutó de un enérgico Willie Colón. Sin poderte hablar contó con la segunda participación destacada de Prodigio Claudio Jr. que le mereció el aplauso de la audiencia. Willie Colón compartió la historia de Mi sueño cuya versión original en portugués bajo el título de Disritmia fue grabada en samba por el cantante brasileño Martinho Da Vila en 1974. Destacó Colón Román que, en una época donde “no había computadoras, ni internet, escuchó la canción, investigó y compro un diccionario de portugués a español” para traducir su letra e incluirla en su álbum Fantasmas de 1981. Con la frase “así se toca”, Willie Colón resaltó la prodigiosidad de Prodigio Claudio al ejecutar el cuatro. Un momento jocoso aconteció al finalizar Mi sueño, en que Willie Colón daba señales a la orquesta, que seguían sus instrucciones, entre las pausas y regresos.
Del reencuentro con el público puertorriqueño, merece resaltarse el momento que tuvo como protagonista el Homenaje a Héctor Lavoe, que inició con el tema homónimo, seguido de Periódico de ayer, El Todopoderoso y El cantante. Precisamente, con el final del tema, la audiencia tuvo un agasajo dividido en varios solos en que Jeffrey López (percusión), Cristian Rivera (conga) y Jorge González (bongó) se destacaron ejecutando magistralmente sus respectivos instrumentos deleitando a la audiencia que aplaudió con efusividad su virtuosidad.
Otro momento divertido, que provocó las carcajadas de la audiencia, pero que también fue un instante de gran reflexión, ocurrió en el preámbulo a interpretar su penúltimo tema en el que destacó que “mi abuela siempre me decía cuando tú le apuntas a una persona acusándola, tienes tres dedos apuntándote a ti. Por eso, cuando yo critico la gente hago así (con todas las puntas de los dedos). Es un consejo” destacó Willie Colón. Uno de los temas esperados de la noche fue precisamente, El gran varón (1989), que se convirtió en un gran éxito en la década de los ochenta, periodo en que visibilizó la temática de la transexualidad y el estigma social por el desconocimiento que había sobre la enfermedad del VIH. Su magistral interpretación se acompañó de un discreto, pero asertivo diseño de luces alusivo a los colores que se identifican con la comunidad LGBTTIQ+. El gran varón es una canción que lleva un poderoso mensaje, aunque para atemperarlo, habría que destacar que no hay nada que corregir en la naturaleza, ni enderezar en el árbol del amor entre iguales. El amor y las formas de amar consentidas no deberían ser cuestionadas. Un tema de los ochenta sigue tan vigente en las luchas contemporáneas en que familias incapaces de amar, siguen abandonando a sus hijos e hijas, como lo hizo don Andrés, ante su imposibilidad de respetar la forma de amar de su hijo Simón.
Luego de presentar su extraordinaria orquesta y a cada uno de los integrantes del gran equipo de producción que obtuvo el reconocimiento del “sold out”, un agradecido Willie Colón expresó ante la audiencia “Muchas gracias, por el apoyo y por su presencia. Gracias Puerto Rico. Dios los bendiga, Puerto Rico es mi norte, Puerto Rico es la idea que me hizo quién yo soy. Así que, gracias, Puerto Rico”. Se despidió del escenario con el tema Me voy, con el que se fue dando por culminada a velada ante un público que, deseoso de seguirle escuchando cantar, se quedó esperando que le complacieran con la ñapa.
La fanaticada del reconocido trombonista esperó casi un mes a que llegara la nueva fecha que, por motivos del covid-19, el cantante estuvo imposibilitado de realizar en la fecha original durante las festividades navidades. Hay que reconocer que, a pesar de la afección de la que se recupera, dio un buen espectáculo de casi hora y media de duración. Entre tantos éxitos acumulados en los 56 años de carrera musical y los 52 de la grabación de Asalto Navideño (1970) que pretendió conmemorar en ese concierto, siempre habrá el que deseaba que cantara algunos de los éxitos que tanto ha disfrutado su fanaticada a lo largo de su carrera musical.
El evento fue una producción de Alexandra Fuentes (Alexandra, LLC) como productora ejecutiva y de Juan R. Ward Cid como productor general. El exquisito diseño de luces y la dirección técnica estuvo a cargo del reconocido maestro luminotécnico Quique Benet. Integraron la orquesta: Jorge González (bongó), Jeffrey López (percusión), Cristian Rivera (conga), Joseph González (coro 1), Diego Giraldo (coro 2), Iván Renta (saxofón), Frank Cohen (1er trombón) Daniel Reagan (2do trombón), Eugenio Pérez (bajo) y Claudio Eligio, Jr. conocido como Prodigio Claudio en el cuatro puertorriqueño.