No hay palabra ni gesto apropiado, en estos momentos, para poder expresar nuestros sentimientos de agradecimiento y alegría, que alcancen a retribuir a cabalidad, todo el respaldo y muestras de simpatía hacia nuestra organización musical: La Orquesta Del Rey de Puerto Rico.
El día de ayer, domingo 22 de agosto, tras nuestra presentación en la Gala Final del Concurso de Orquestas de Salsa Virtual World Wide, en la segunda edición del Día Internacional De La Salsa – Panamá 2021 bajo la organización de Smart People Corp., la calificación de los cuatro integrantes del Jurado, sumado al apoyo del quinto jurado: el soberano público, a través de sus votaciones, nos permitieron ubicarnos en el primer lugar de este certamen y hacernos de esta victoria que llena de alegría nuestros corazones, pero que a su vez nos compromete a seguir trabajando de cara a nuestra próxima presentación en la Internacional Tarima del Día Nacional De La Zalsa, en marzo del siguiente año, en el Estadio Hiram Bithorn de San Juan, Puerto Rico.
A nuestras familias, a nuestras amistades, a nuestro público, al Pueblo Puertorriqueño, a los seguidores de nuestra propuesta, a las y los votantes que se pierden en el anonimato, nuestro agradecimiento inconmensurable. Sepan que, si estuviese en nuestras posibilidades, intentaríamos estrechar sus manos y nos confundiríamos con ustedes en un gran y apretado abrazo, para de esa manera como muestra de la inmensa alegría que sentimos por haber conseguido este triunfo, esbozar una sonrisa franca y dejar que nuestros labios expresen esa mágica palabra que todo lo puede y que todo lo sana: GRACIAS.
Los tiempos difíciles a los que asistimos tras la pandemia que azota a la humanidad, la distancia y muchas otras razones, impiden que lo expresado líneas arriba se materialice, pero sepan que hoy más que nunca nuestro trabajo musical, nuestras presentaciones y nuestra vida diaria, estarán dedicadas a honrar ese respaldo recibido.
A los integrantes de las diferentes orquestas con las que compartimos a lo largo de este concurso, nuestro aplauso y nuestras palabras de aliento para seguir en la brega: el camino nunca es fácil, de eso podemos dar fe.
A los organizadores del concurso y a su Jurado, las gracias por la oportunidad y por las indicaciones y enseñanzas que recibimos, y que -con seguridad- sabremos aplicar en el devenir de nuestro trabajo.
Compartimos este triunfo con nuestros padrinos musicales, los señores Ricardo Maldonado y Roberto Cruz, mejor conocidos como Richie Ray y Bobby Cruz, quienes desde el día uno, sujetaron nuestras manos y fueron nuestros ojos para divisar el camino por el que queríamos transitar; siendo, además, a lo largo de estos quince años de labor musical y vida diaria, inspiración en esta difícil industria: la musical.
A nuestras familias, sepan que el triunfo es compartido: han sido largas jornadas de trabajo, tal vez de obligada separación en momentos muy importantes para cada uno de sus hogares. La vida del músico no es fácil, pero los resultados de la entrega y el sacrificio son precisamente éstos en los que la celebración permite enjuagar nuestras lágrimas y -tal vez- hacen posible cicatrizar ciertas heridas que alguna ausencia produjo.
A las y los integrantes de la Familia Musical de la Orquesta Del Rey De Puerto Rico, mi agradecimiento infinito. A quienes fueron parte de nuestra organización en sus inicios, a los que permanecen desde ese entonces, a los que se integraron posteriormente, a los compositores cuyas creaciones son nuestras cartas de presentación, a los arreglistas de nuestros temas, a quienes han hecho y siguen haciendo el trabajo de promoción en nuestro favor, les decimos que El Rey sigue dándonos sus bendiciones, y nosotros de manera humilde agradeceremos con más y mejor trabajo por la fortuna de gozar de la protección de su manto que nos cubre.