Ricardo Arjona continua de estreno conoce su nuevo sencillo «Tarot» hecho en Puerto Rico

El Cantautor explica dónde y cómo nació esta canción. Conocé aquí la historia.

Descargá el video testimonial

LA ÚNICA CANCIÓN QUE SE MUDÓ DE ABBEY ROAD A BUDAPESTHay canciones que se conciben un día en el tiempo y se paren mucho tiempo después.

TAROT, otra pieza de esta galería de historias que contradicen el mundo musical del momento, marcando un antes y un después en los proyectos auténticos que nacieron para dejar huella.

Es el sexto lanzamiento del Álbum ¨BLANCO¨ de Ricardo Arjona, que manteniendo la modalidad de una canción por semana sale hoy, viernes 26 de Junio en todas la plataformas digitales.

Se concibió una tarde en Puerto Rico, nació 25 años después y se mudó de los legendarios estudios de Abbey Road a Budapest para ser grabada por la sinfónica de Budapest.

Esta es una de las piezas más artísticas, y oscuras del proyecto BLANCO y NEGRO, la historia que narra el drama de un heroinómano.

TAROT
LETRA Y MÚSICA: RICARDO ARJONA
 
Su padre fumaba en la sala
Su madre miraba el reloj
La aguja está bajo la cama
Muerte gritaba el Tarot
 
Cucharas que hacen de cocina
Cerillos que encienden la paz
El infierno buscó medicina
Disparos de alivio fugaz.
 
Era sólo otra noche de esas
De un viaje por el miedo y el dolor
No pudieron ácido y cervezas
Inventarte algún mundo algo mejor.
 
Y se apagó la luz
Y no volviste más
Y se borró el futuro con sus días y sus noches.
 
Y se apagó la luz
Y se acabó el dolor
Y te escupió a la cara el fantasma al que le huías.
 
El ciego vio luces prendidas
El sordo escuchó una canción
El muerto ya estaba con vida
La vida no tuvo razón.
 
Supiste ya en en el otro lado
Que el miedo fue solo un ladrón
Vivir no es andar asustado
Morir no fue la solución.
 
El rehab te habló de otro camino
Con el protocolo de rigor
Héroe no existe en femenino
Ni confundas a un dealer con doctor
 
Y se apagó la luz
Y no volviste más
Y se acabó el futuro con sus días y sus noches
 
Y se apagó la luz
Y se acabó el dolor
Y te escupió a la cara el fantasma al que le huías
 
El ciego vio luces prendidas
El sordo escuchó una canción
El muerto ya estaba con vida
La vida no tuvo razón.